Gracias a cada una de las personas que toman la palabra solidaridad como más que una palabra.
Gracias por pensar que todos somos iguales y ningún inocente merece tener dolor gratuito.
Os dejo mi aportación en este blog, en la línea de creandyy: una frase simple, con la inocencia de lo infantil, pero que nos debe hacer reflexionar sobre la vida.